Encontramos un cambio drástico en la Tv española, en especial en la oferta.

Hace 10 años destacaba el deseo de aumentar la cultura o la política en la audiencia. Cadenas públicas estatales o autonómicas al margen de leyes de mercado y el éxito o fracaso de un programa no se valoraba por la audiencia conseguida o por la publicidad que conseguía.

Hoy en día existe una nueva lógica sobre esto: el criterio básico consiste en programar lo que el público demanda y tiene interés en consumir, buscando el número de audiencia o al menos cubrir gastos del programa.

Vamos, lo que se busca es ganar dinero llegando al máximo de público disponible sin importar la calidad del contenido.

Por este motivo han desaparecido o han sido enviados a horarios muy marginales muchos géneros o programas parcialmente minoritarios como el cine en blanco y negro o los programas infantiles de la tarde.

La oferta televisiva de la última década va enfocada hacia los gustos e intereses de los grandes consumidores estadísticamente hablando: personas mayores, de clases bajas y zonas rurales.

Encontramos un cambio en cuanto a programas más vistos en los últimos diez años: A  finales de los ochenta los largometrajes de origen estadounidense; en los 90 y actualidad , vemos que los programas deportivos, líderes indiscutibles desde 1994 (de hecho casi exclusivamente fútbol y en tiempos de Miguel Indurain ciclismo) y a las series de producción propia (tres o cuatro presentes en la lista de cada año, en los últimos años Cuéntame, cómo pasó). 

También hacemos mención de debates electorales, bodas reales o galas extraordinarias como las de Operación Triunfo o el Festival de la canción de Eurovisión (años 2002 y 2003). Y algunas telenovelas (Cristal) o realities (¿Quién sabe donde? Y, recientemente, Gran Hermano).
 

Por lo que, dividiendo esto en dos fases :

-primera etapa (primera mitad de los 90) situación de competencia que produce un funcionamiento desajustado del sistema televisivo español.

-segunda etapa estabilización de la actividad televisiva centrada a partir del éxito de las series de producción propia.